Agradecimiento desde Yaundé

1110

“Mi más sincero agradecimiento a todos los que habéis hecho el esfuerzo de traer el calzado, la ropa y haber hecho feliz a un montón de gente”

Ramón Ruiz (Hermano del misionero Alfonso Ruiz)

Desde hace 46 años el misionero jesuita de origen arnedano Alfonso Ruiz se encuentra en África prestando atención a los más desfavorecidos. Primero trabajó en Chad y ahora lo hace en Yaundé, capital de Camerún. Allí dirige el Hogar de la Esperanza, un organismo que ha tendido su mano a muchos niños de la calle. Jóvenes de entre 8 y 17 años que comen, juegan, duermen y viven en las calles de la capital camerunesa, donde algunos piden como mendigos, otros trabajan puntualmente en mercados y otros caen en las drogas. Por ello y con el objetivo de mejorar la situación de estos chavales, así como de proporcionarles un futuro más esperanzador, desde este centro se llevan a acabo distintas iniciativas encaminadas a reinsertarlos en sus familias o en la sociedad.
Para los jóvenes que muestren interés por salir de al calle se abren las puertas de este Hogar de la Esperanza que les proporciona vivienda, comida, aseo y enseñanza. Además se trabajan con ellos otra serie de actividades muy atractivas para los chicos como los malabarismos y las acrobacias.
El mes de mayo del pasado año 2014 el padre Alfonso Ruiz visitó Arnedo con un proyecto bajo el brazo, recoger calzado para llevar a los niños de la calle de Yaundé. Su llamada fue atendida por los vecinos de Arnedo que llenaron un camión con dos mil pares de zapatos, además de ropa, material escolar y juegos para estos jóvenes. Tras un complicado viaje de miles de kilómetros, finalmente esta carga llegó a su destino y por ello el arquitecto arnedano, Ramón Ruiz, en nombre de su hermano Alfonso ha querido agradecer su enorme solidaridad.
Y no es el único que ha agradecido el buen hacer de los arnedanos, ya que a través de un vídeo realizado por el propio Alfonso Ruiz, podemos escuchar a los destinatarios de la ayuda dando las gracias por todas las aportaciones realizadas desde Arnedo.
Cáritas Parroquial, empresas, asociaciones y personas a nivel particular se volcaron con esta causa, llenando en tiempo récord este camión y superando cualquier expectativa. Un variado material que, como un maravilloso regalo llegó Yaundé, donde sus destinatarios lo recibieron con emoción y alegría. Allí el misionero Alfonso Ruiz se encargó de repartirlo entre los distintos proyectos de ayuda en los que trabaja, haciendo que los zapatos, y sobre todo, el cariño y el afecto de la ciudad de Arnedo estén presentes en esta zona del continente africano.